Golpe de timón en la política social en Durango
Con la reciente entrega de la evaluación de desempeño al Fondo de Aportaciones para la Infraestructura Social en su componente estatal FISE (2022) por parte del Inevap, Instituto encargado de evaluar los programas y las políticas publicas del estado de Durango, quedan de manifiesto varios temas que deseo compartir, vayamos por partes.
La evaluación se da en el marco del Fondo para la Infraestructura Social (FAIS) el cual se divide en dos ramas el municipal (FISM) y estatal (FISE); está definida a abordar el componente estatal desde el punto de vista del articulo 33 de la Ley de Coordinación Fiscal (LCF). Esta norma menciona que los recursos del FAIS deben destinarse exclusivamente al financiamiento de obras, acciones sociales básicas y a inversiones que beneficien directamente a la población en pobreza extrema, localidades con alto o muy alto nivel de rezago social conforme a la Ley General de Desarrollo Social.
La evaluación tiene por objeto evaluar si el desempeño de las aportaciones federales del FAIS en Durango contribuyeron a mejorar o beneficiar a sectores de la población en condiciones de rezago.
Asi pues estos son los datos que no debemos perder de vista la ciudadanía: en 2021 el estado de Durango recibió 132,041,712 pesos, en este sentido se destino el 84.72% de los recursos a proyectos de incidencia directa y el 15.28% en proyectos de incidencia complementaria. El estado de Durango cuenta con un grado de rezago social medio según el informe de Coneval en el 2020, asi como tambien la población en situación de pobreza del año 2018 al 2020 disminuyo de 36.6% al 34.4% la población en situación de pobreza extrema casi se duplico del 2.2% al 4.3%.
En términos de carencia por calidad y espacios de la vivienda el informe muestra un aumento del 4.8% al 5.8% de la población, hubo tambien hubo un crecimiento en la población por carencia por acceso a los servicios básicos en la vivienda de 5.7% a 5.9%.
Con todo esto y el resultado de la información que arroja el Censo de Población y Vivienda 2020, se puede observar como el estado de Durango; no ha tenido avances en la mitigación de la mayoría de los indicadores relacionados con la pobreza y rezago social, en especial en la población en viviendas con hacinamiento, con muros o techos de material endeble y sin drenaje.
El informe concluye con una serie de recomendaciones que, en la teoría de cualquier evaluación de un programa público, en caso de atenderse, contribuirían a una mejor gestión del fondo federal y que a su vez se vean reflejados en beneficios directos a la población del estado de Durango. Las recomendaciones se concentraron en tres grandes apartados:
- Generación de un nuevo diagnóstico de la situación de la pobreza y rezago social dentro del estado de Durango.
- Replanteamiento e implementación de la metodología de como focalizar, priorizar y decidir las obras de infraestructura social financiadas con recursos provenientes de este fondo.
- Implementación de un plan de capacitación.
En conclusión, las recomendaciones hablan de un nuevo rediseño de la política social en el estado. Es necesario hacer un alto en como venimos haciendo el combate a la pobreza en la práctica y alrededor de evidencias de su nulo impacto y mal desempeño; incluso tenemos incrementos por ejemplo en pobreza extrema.
En las buenas noticias estamos en el momento justo de que los encargados de esta área coloquen a partir de ya, nuevas coordenadas de política social para que retomemos el rumbo de combatir eficazmente la pobreza.
Ante presupuestos tan cortos y con tantas necesidades apremiantes es necesario ser eficientes y eficaces. Es mejor un golpe de timón en la política social ahora, que seguir en una ruta que no lleva a ningún buen puerto.
#evaluaresmejorar
F. Antonio Vázquez Sandoval
Consejero del Instituto de Políticas Publicas del estado de Durango.
