El presidente de Ecuador, Daniel Noboa, aseguró que no se arrepiente de haber ordenado el asalto a la Embajada de México en Quito para detener a Jorge Glas.
«No me arrepiento», afirmó Noboa en una entrevista brindada la pasada semana al canal australiano SBS y difundida este lunes, la primera interacción del jefe de Estado con la prensa desde el inicio de esta crisis con México.
Jorge Glas, exvicepresidente de Rafael Correa (2007-2017), había obtenido asilo horas antes de parte del Gobierno mexicano, en cabeza de Andrés Manuel López Obrador.
Mientras Noboa explica su decisión de asaltar la sede diplomática de México, un colectivo de docentes se concentró este lunes 15 de abril ante el Ministerio de Educación, en Quito, para protestar contra lo que consideran un proceso de «militarización» en Ecuador, luego de que Noboa declarase el «conflicto armado interno» contra las bandas del crimen organizado, a las que llama “terroristas».
Se trata de más de 150 docentes de 21 universidades de Quito, Cuenca, Esmeraldas y Guayaquil y otros docentes de América Latina, Estados Unidos y Europa que rechazan la «militarización, represión y racismo» que, en su opinión, ha provocado la declaratoria de «conflicto armado interno», tras la cual Noboa calificó de «terroristas» a 22 bandas criminales.
«El proceso de militarización que buscaría contrarrestar la violencia delincuencial rebautizada como ‘terrorista’, está generando más violencia de la que pretende combatir», según los manifestantes.
Los docentes sostienen que la solución a los problemas de inseguridad del país «no pasa por armarse, generar más violencia, sucumbir a la arbitrariedad y al irrespeto a los derechos humanos”.
«Las soluciones complejas que necesitamos pasan por exigir otras políticas y otros enfoques que nos permitan recomponer los vínculos, también desde la educación», sostienen en un comunicado.
Incursión policial del 5 de abril, «muestra de militarización”
Los manifestantes puntan que la incursión policial del 5 de abril en la Embajada de México en Quito, para detener al ex vicepresidente Jorge Glas, demuestra «que el Gobierno ha tomado la política de la militarización y la fuerza represiva como única salida”.
Por último, opinan que la consulta popular del próximo domingo sobre seguridad, justicia y empleo, «busca radicalizar esta situación por medio de plantear preguntas que refuerzan aún más la militarización de la sociedad y que precarizan la vida de los trabajadores y trabajadoras de este país».
Redacción Voz Libre con información de dw.com