Sinaloa dice que fue acá y Durango dice que los 8 fueron ejecutados allá
Hasta ahora, no se sabe si la ejecución de las ocho personas encontradas el fin de semana en Tamazula ocurrió en Sinaloa o en territorio duranguense, pues mientras el gobierno vecino sostiene que la investigación corre por cuenta de la Fiscalía de Durango, la fiscal Sonia Yadira De la Garza dijo que no se harán aquí las indagatorias del cruento caso, sino que deberán ser realizadas en suelo sinaloense.
Es decir, hay falta de claridad no solamente respecto a cómo pasaron los hechos, pero además, derivado de esto, queda exhibida también la nula coordinación interinstitucional que suele presumirse en el discurso, cuando se promete combatir la delincuencia.
Ayer, la propia Fiscalía de Durango dio a conocer que el sábado último, a eso de las 7 de la mañana, ingresaron a la cabecera municipal de Tamazula varios vehículos provenientes de Sinaloa, cuyos ocupantes dejaron seis cadáveres del sexo masculino en el cruce de las calles División del Norte y Real Félix.
Todos los cuerpos, según datos de la dependencia, mostraban signos de tortura, heridas provocadas por proyectil de arma de fuego y rigidez cadavérica, o sea que ya tenían horas de haber sido privados de la vida; tampoco se encontraron cartuchos percutidos en el lugar del hallazgo.
Después, como a las 10 de la mañana, reportaron que a pie de carretera, como a 10 minutos de la cabecera municipal, estaban dos cuerpos más con idénticas características: del sexo masculino, baleados, con huellas de tortura y rigidez cadáverica. Tampoco se localizaron indicios balísticos en ese sitio.
Los presuntos responsables dejaron abandonado un vehículo Pick Up con una gran cantidad de líquido hemático en la parte posterior, por lo que presumiblemente en este mismo se trasladaron los cuerpos sin vida para dejarlos en Tamazula. Los occisos fueron identificados y, en su mayoría, son oriundos de Sinaloa; entre estos hay un menor de 13 años, incluso con Alerta Ámbar de búsqueda en aquel estado.
La Fiscalía estatal de Durango cuenta con información de que seis de los ocho ultimados fueron levantados en Culiacán el domingo 22 de octubre y los otros dos ejecutados, el 24 de octubre, justo cuando salían de la Fiscalía sinaloense a donde acudieron a presentar denuncia por la desaparición de los primeros.
Por todo esto, la Fiscalía de Durango envió los ocho cadáveres al Servicio Médico Forense de la capital sinaloense y declinará el seguimiento de las pesquisas, a fin de que la continúe su contraparte en el estado de Sinaloa.
No obstante, ayer en conferencia de prensa, el gobernador de Sinaloa, Rubén Rocha Moya, mencionó que la investigación estaba en manos de las autoridades de Durango y se rehusó a ahondar en esta ejecución múltiple. “No lo tengo confirmado, es una investigación que está haciendo la Fiscalía de Durango”, dijo Rocha Moya.
Así pues, los hechos y primeras investigaciones, según parece, muestran evidencias de que las ejecuciones hayan ocurrido en Sinaloa, pero lo dicho por el mandatario sinaloense advierte una intención clara de “echar la bolita” a Durango. En tal circunstancia, difícilmente se aclararán los hechos y habrá justicia para las víctimas.
Lo que no se duda, considerando el momento de violencia que vive el país desde hace años, es que las autoridades de los tres órdenes de gobierno han sido rebasadas por la criminalidad, pero no sólo eso, sino que están lejos de esa coordinación interinstitucional tan necesaria desde que esta ola comenzó, sexenios atrás, sin dar tregua ni respiro hasta el día de hoy. Al tiempo.
COLMILLOS Y GARRAS
MÁS QUE EMOTIVO el Altar de Muertos erigido en honor de las víctimas fatales de la meningitis en el Corredor Constitución. Imponente ver tanta fotografía de quienes perdieron la vida por causas absurdas que todavía no se aclaran por completo. Una tragedia cuyas consecuencias fatídicas están padeciendo decenas de familias… Y LA CANIRAC sostiene que los restaurantes en Durango no han podido recuperarse en estos meses críticos y que esperaban mejores ganancias en septiembre y octubre, por lo que les espera un cierre de año difícil e incluso algunos negocios están a punto de cerrar… SEGÚN ADRIANA PORRAS Zubiría, quien preside este organismo del gremio restaurantero, desde agosto están teniendo ganancias inferiores a las que habían tenido en otros años.
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