Es hora de exigirles rendición de cuentas de otras formas a los funcionarios
Después de lo que hemos presenciado durante las comparecencias de altos funcionarios ante el Congreso estatal, con motivo del análisis de la glosa del primer informe de gobierno, queda claro que tanto legisladores como los comparecientes batallan para llegar al fondo de los temas y más bien se quedan en la superficie.
En otras palabras, quienes responden a las preguntas de los legisladores no lo hacen, en lo general, para trasparentar un asunto, sino evaden meterse en profundidades, en lo que está resultando en un montaje alejado de un ejercicio republicano y de una verdadera rendición de cuentas, como lo exige la ley.
Entonces, a la reforma constitucional última para eximir al Ejecutivo de presentarse al recinto parlamentario a rendir las cuentas de los últimos 12 meses, sería recomendable hacerle un adendum para que, en lo sucesivo, dejen de comparecer los secretarios del gabinete estatal hasta en tanto no haya la convicción de ser claros y comprometidos con la sociedad.
Al menos hasta ayer, poco sustantivas habían resultado las comparecencias de los responsables de la Secretaría General de Gobierno, de Bienestar, de Desarrollo Económico, entre otros, porque ninguno ha dado certeza del estado de cosas real en cada una de las áreas que encabezan.
Tampoco los diputados, salvo honrosas excepciones, han demostrado saber de los temas o buscar las respuestas que la sociedad pediría; o sea, se han visto muy flexibles y complacientes, como para que no crear demasiada polémica en áreas donde cuestionar es imperativo.
Da pena, de la misma manera, que otros actores políticos aprovechen estas ocasiones para acarrear seguidores que hagan escándalo, que insulten o protesten para llamar la atención mediática. El ejercicio de la libertad de expresión no puede ser coartado, pero el objetivo de las comparecencias es exclusivamente informar, sin poner distractores sobre la mesa.
Así pues, urge cambiar este formato que se volvió una práctica sin sentido. Por supuesto que la rendición de cuentas por parte de quienes nos gobiernan, no puede ni debe anularse, menos en un país como el nuestro, donde la opacidad reina.
Por increíble que parezca, algunos funcionarios han aprovechado su comparecencia para invitar a sus allegados y familias, como si se tratara de un evento en el que reciben una condecoración por su desempeño anual.
Los diputados, por su parte, no desperdician la oportunidad para alabar a los ponentes y tomarse fotografías con ellos para presumirlas en sus redes sociales, en lo que termina convirtiéndose en una pasarela llena de elogios y saludos.
Por todo esto, en muy poco o nada benefician a la sociedad duranguense estos eventos en los que, incluso, hay desinformación sobre los logros y pendientes de un régimen luego de un año de trabajo. Es hora de exigirles cuentas de maneras más eficientes y creativas a los funcionarios. Al tiempo.
COLMILLOS Y GARRAS
LAS ENCUESTAS DEFINIRÁN si el exgobernador José Aispuro es o no candidato a senador, sostuvo ayer Minka Hernández, dirigente municipal del PAN, en abierta contradicción a la postura del PRI estatal, que se opone a una nueva participación electoral del exmandatario… LO QUE ASOMA es un pleito frontal entre panistas y priistas por las candidaturas al Senado, Cámara de Diputados federal y también para las diputaciones locales. Son muy pocas posiciones y demasiados “tiradores” en ambos partidos… CARAY, EN EL Hospital del Niño atendieron a un menor de ocho años nada menos que por ingesta de alcohol; de igual forma, en el Centro Mi Casa del DIF estatal se han detectado adolescentes femeninas, de entre 12 y 16 años, con adicciones a drogas ¿Qué tanto cuidado estamos teniendo con nuestros hijos?
TWITTER: @rubencardenas10