En el marco del informe Panorama Social 2022 de América Latina y el Caribe, se proyecta que 201 millones de personas en la región viven en situación de pobreza y de ellos, 82 millones se encuentran en situación de pobreza.
La Comisión Económica para América Latina y el Caribe (CEPAL) de las Naciones Unidas hace un llamado a abordar con urgencia la crisis silenciosa en la educación para evitar el riesgo de una generación perdida.
América Latina y el Caribe sufrieron el apagón educativo más prolongado en todo el mundo con casi 70 semanas del cierre de establecimientos con relación a las 41 semanas en promedio que en el resto del mundo, lo que profundizó las desigualdades ya existentes en materia de acceso, inclusión y calidad de la educación.
En este periodo, una de las principales limitaciones para la continuidad educativa fueron las desigualdades en el acceso a la conectividad, equipamiento y habilidades digitales. En el 2021, en 8 de 12 países de la región, más del 60% de la población menor de 18 años no tenía conectividad en su hogar. La razón; el COVID-19.
“La cascada de choques externos, la desaceleración del crecimiento económico, la débil recuperación del empleo y la inflación a la alza, profundizan y prolongan la crisis en América Latina y el Caribe”, señaló José Manuel Salazar-Xirinachs, Secretario Ejecutivo de la CEPAL.
Enfatizó en que “no se ha logrado revertir los impactos de la pandemia en materia de pobreza y pobreza extrema y los países enfrentan una crisis silenciosa en educación que afecta el futuro de las nuevas generaciones”.
Por otro lado, continúan las brechas de género importantes en términos de desempeño y áreas de formación. En promedio, las estudiantes mujeres tienen peores desempeños en matemáticas y ciencias durante la educación básica, disparidades que se profundizan en los sectores de menores ingresos.
Pese a los avances de las últimas décadas en cuanto al acceso e inclusión educativa en todos los niveles, desde la primera infancia hasta la educación superior, los países de la región arrastraban serias deudas en igualdad y calidad previo a la crisis provocada por la pandemia que ha hacían difícil alcanzar las metas del Objetivo de Desarrollo Sostenible para el 2030.
Redacción Voz Libre con información de cepal.org