Ni tanto que queme al santo
El calor de ígneo elemento ayuda a que las piñas suelten la semilla para la repoblación natural, el problema estriba que desde que aparece el hombre, los eventos se multiplican por cien, pues el origen está en las fogatas mal apagadas, las colillas de cigarro tiradas en la carretera e inclusive los de carácter intencional, con el propósito de extraer la madera como muerta.
Fue en el sexenio de Vicente Fox que se constituye la Comisión Nacional Forestal CONAFOR su primer director Ing Alberto Cárdenas Jiménez, algunas de las funciones que en ese entonces se inscribían en la SEMARNAT Secretaría de Medio Ambiente y Recursos Naturales fueron transferidas a la nueva dependencia específica para la atención a ese importante sector.
Una de esas funciones es la de el combate a los incendios forestales, bueno, prevención, deteccion, control y extinción.
La estructura adquirió carácter nacional, cada estado contaba con una muy buena oficina, equipo humano y material necesario.
Si bien la responsabilidad directa del combate a los incendios de acuerdo a la ley en la materia, es del dueño del predio, sea privado, ejidal o comunitario.
El trabajo de los brigadistas (bomberos) es muy loable, sacrificada y poco valorada por la sociedad en general, pues los riesgos son grandes, de tal forma que ya son varios los elementos en pleno combate.
Algunas de las razones por las que Fox crea a la CONFOR es porque no solo veía al árbol sino al bosque completo; agua, suelo, agua, fauna, flora, en fin la biodiversidad completa de este ecosistema.
Durango siendo poseedor de las mayores extensiones boscosas del país, sufre en consecuencia, por obligada razón, de afectaciones cada año, de varias hectáreas.
Esta visión se perdió con los gobiernos de MORENA, pues en el transcurso de cinco años, fueron “achicando” por no decir desmantelando a la CONAFOR, el presupuesto lo dice todo, con ello el aumento de daños.
En el último año de Peña Nieto se habían asignado 5,361 millones de pesos a la Conafor. En el primer año de AMLO, el organismo sufrió un recorte brutal, de dos mil millones de pesos.
Así se minimizaron las capacidades técnicas, humanas, financieras y operativas” de la Conafor, el gobierno morenista, daba inicio al desmantelamiento de esa importante institución.
A la par cancela el programa de empleo temporal que dejó en el desempleo a brigadas enteras de cortafuegos que hacían labores preventivas en bosques y áreas protegidas, como brechas, recolección de material muerto, quemas controladas y que, llegado el caso, se movilizaban para atender incendios.
Durante los años 2021 y 2022 se presentaron 13, 250 incendios que redujeron a cenizas un millón 39 mil 666.61 hectáreas.
El gobierno con su acostumbrada mitomanía declaró “Ahora se destinan más recursos para atender los incendios”
Los ajustes a la baja continuaron en 2022 y 2023, las cifras de incendios se elevaron a un millón, 47 mil 492.52 hectáreas, según cifras oficiales.
En estas semanas los incendios hacen su presa, devastando bosques, sin poder enfrentarlos a falta de presupuesto.
Solo quienes viven en la sierra y los brigadistas, saben la crudeza de la pérdidas de su patrimonio, y el impacto a los servicios ambientales.
Ya no existe un dejo de esperanza, en palacio solo se habla de otras cifras.
Los incendios también llegarán el 2 de junio, bien merece una buena despedida este gobierno federal y su partido MORENA.
