En ciencia no hay cabida a la ideología política
Una vez instalado en “La casa del estudiante” allá por el rumbo de Tepito y La Lagunilla, el joven provinciano daba inicio a su propósito de no solo obtener una licenciatura sino maestría y de ser posible doctorado.
Ya habían transcurrido 10 años, salpicados por hambres, fríos, soledades, miedos, desesperanzas, pero todo valió la pena, hoy gozaba del reconocimiento nacional y de varios países por la contribución a la ciencia, más de 8 libros, decenas de artículos científicos. conferencias, seminarios, y el proceso “in vitro” de la cereza de sus investigaciones, Tamizaje Prenatal No Invasivo, que permitirá la detección de anomalías genéticas de un feto, a través de la sangre de la madre.
Sus charlas frecuentes con Dr Mario Molina premio Nobel mexicano, infundían un generoso espíritu de poder hacer en el país que le dio estudios.
Pero no todo marchó sobre ruedas en los últimos años, el recorte presupuestal federal, a ciencia y tecnología, fue mortal, la politización a través del Conacyt “Una ciencia para el pueblo” aplicada a resolver sus necesidades más apremiantes” fue la base para la cancelación de becas de postgrado, ediciones científicas, estudios en el extranjero, nombramiento de funcionarios de dudosa capacidad académica, la pérdida de la autonomía.
A falta de recursos e infraestructura la secuenciación de métodos y técnicas bioquímicas terminó dando al traste lamentablemente a varios años de esfuerzos en laboratorio.
Muy a su pesar tuvo que buscar refugio en universidad de fama mundial, allá en el viejo mundo, que sin pensarlo dos veces, le abrieron sus puertas y la financiación para continuar con sus investigaciones.
Con la esperanza, no perdía la oportunidad de estar informado de los quehaceres de sus colegas en territorio mexicano, como del desenvolvimiento del relevo presidencial.
Con la agudeza de ser investigador, encontraba incongruencia total en la candidata oficialista que ondea la bandera de “científica” cuando durante cinco años fue partícipe, por lo menos por omisión” del desmantelamiento de la investigación en México.
La candidata más ciudadana que de partidos, guardaba algunas similitudes en las formas de llegar a la provincia, luchar ante todo en la megalópolis, lograr resultados aplicados para mejorar el “statu quo”
No tenía duda alguna de cómo dese el sufragio, iniciar la construcción de la estructura formal de la ciencia y tecnología mexicana.