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Héctor Vela y Ulises Adame la jugaron mal, pero se acomodaron bien

En el 2018, cuando el fenómeno AMLO andaba en su máximo esplendor por todo México, el Movimiento de Regeneración Nacional se propuso entonces, aprovechando su fuerza, debilitar al Partido Revolucionario Institucional, empezando por extender una invitación a militantes decepcionados de tantas corruptelas en el tricolor.

Y entre estos priistas inconformes estaban Héctor Vela Valenzuela, Secretario de Gobierno en la actual administración y Ulises Adame, hoy subsecretario de Educación estatal en la Comarca Lagunera. Se puede decir, recordando este episodio, que ambos volvieron al redil después de haber participado ese año, con malos resultados, en el proceso morenista de selección interna.

Ellos y muchos otros se vieron temporalmente “encandilados” por el arrastre que tenía en aquel momento Andrés Manuel López Obrador en su tercer intento consecutivo por llegar a la presidencia, así que no pocos priistas, panistas y de otros partidos buscaban cualquier resquicio para incrustarse en MORENA.

Por cierto, operadores de MORENA en esa elección federal recuerdan que, incluso, el primer priísta invitado para defender las siglas del morenismo en la fórmula al Senado de la República fue el hoy gobernador Esteban Villegas, quien pidió tiempo para reflexionar y al final decidió continuar en el tricolor.

El caso de Héctor Vela y Ulises Adame fue distinto, pues el primero aspiraba a la diputación federal por el distrito 04 y el segundo quiso un escaño en el Senado de la República, oportunidad que les fue respectivamente negada.

Esa ocasión, mantenía su registro electoral el Partido del Encuentro Social y era parte de la alianza con MORENA y el PT, por lo que propuso también dos perfiles con raíz priísta: Oscar García Barrón, exdirigente de la CNC y Adrián Alanís Quiñones, Secretario de Gobierno en la administración de José Aispuro Torres. Ambos buscaban llegar a senadores.

Por MORENA, la propuesta interna para el Senado fue Otniel García Navarro, por lo que los aspirantes encuestados fueron el propio Otniel, García Barrón, Adrián Alanís y Ulises Adame, todos con el ADN del tricolor. Por instrucción directa de la cúpula de MORENA se insertó en la medición a Gonzalo Yáñez al final, que no figuraba al inicio del proceso.

En quinto lugar de la encuesta quedó Ulises Adame, en el cuarto Alanís, en el tercero Otniel, en el segundo García Barrón y Gonzalo Yáñez se ubicó por encima de los cuatro. El resultado de la encuesta agitó con intensidad las aguas en esta lucha por la candidatura al Senado; en ese  cuadro no estaba contemplada Margarita Valdez.

No hubo posibilidad de acuerdo entre el segundo y tercer lugar de los encuestados para completar la fórmula con Gonzalo y, como las fechas de registro estaban a punto de cumplirse, desde el CEN de MORENA se tomó la decisión de conformar la dupla de acuerdo al género, por lo que Margarita Valdez quedó inscrita como candidata a senadora y fue empujada por la ola lopezobradorista hasta el escaño que ocupa en el recinto senatorial.

En cambio, por lo que respecta a las candidaturas a los cuatro distritos electorales federales de Durango, también surgieron los desencuentros y choques; todos andaban con la “espada desenvainada” y no había salida fácil.

Y sí, la inconformidad entre los encuestados se notó en cada uno de los cuatro distritos, pero más subida de tono fue la trifulca entre Héctor Vela Valenzuela y Gustavo Pedro Cortez, en el distrito electoral federal 04. Al parecer, hasta la fecha se lanzan miradas hostiles cuando se encuentran. 

Para cerrar el proceso interno de selección de candidatos a diputados federales de Durango, el Movimiento de Regeneración Nacional tomó una decisión salomónica, sin precedente en todo el país: otorgar las cuatro candidaturas a mujeres, lo que equilibró la lista nacional de candidaturas a la Cámara de Diputados.

Por ello, Martha Olivia García fue candidata en el distrito 01, Marina Vitela en el 02, Maribel Aguilera en el 03 y Patricia Ortega en el 04; todas ellas de plano se sacaron la lotería con AMLO, pues la avalancha las llevó a una victoria casi imposible por otra vía. 

Así pues, por vez primera en la historia, todas las diputaciones federales del estado fueron ocupadas por mujeres. Y en ese 2018, en ninguna otra entidad aplicó MORENA ese criterio, aunque hoy en día la paridad de género ha jugado un papel muy importante en las elecciones, con justa razón.

Fue un proceso electoral histórico, pues, pero ni quien imaginara que dos de aquellos fervorosos defensores de candidaturas por MORENA regresaran sin problema alguno al PRI y hoy, cinco años después, sean parte de una administración estatal. Héctor Vela y Ulises Adame la jugaron mal esa ocasión, pero luego se acomodaron bien. Ni duda cabe.

Cuenta X: @rubencardenas10