Desde las burbujas del poder 

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A propósito de la sequía (IV parte)

“La Santa terquedad”

Relata la biblia de la terquedad de aquellos que en busca de un propósito, luchan hasta alcanzarlo, como la terquedad de Job, para recibir la bendición.

No juzgaré si lo mío, que es de todos, sea santa o no santa terquedad, de lo que estoy cierto es que es prioridad con beneficio común. 

La sequía con sus efectos mayúsculos deriva de dos fenómenos principalmente : El de la naturaleza que no tiene palabra, menos cuando es ofendida por la actividad humana a grado tal que vivimos el cambio climático.

La otra es la forma brutal que le hemos dado al uso del vital líquido, en dos vertientes, la del consumo humano y la del uso en el sector primario.

No dudo de voces, que siempre las hay, señalando que es una exageración la visión personal que informo del problema, otras de que algo he de querer, como quien con mayor rigor científico acuse de supina intervención.

Acepto las dos últimas, si quiero superar los estragos de las sequías recurrentes en Durango, y no soy un erudito en la materia, teniendo saldo a favor por  el esfuerzo del escudriñar en la información disponible.

Mas nos dice una imagen que mil palabras, reza el refrán popular,así que he preparado una serie de ellas, para sostener técnicamente, la preocupación, que a su vez es demanda a nuestras autoridades, de poner manos en el asunto, de manera real, con alcances a corto y mediano plazo, abandonar la comodidad de seguir en el camino de los subsidios temporaleros, que solo son paliativos más no curan la enfermedad. 

Como todos sabemos Durango es el cuarto estado más extenso del país, después de Chihuahua, Sonora y Coahuila, razón por la que nuestra biodiversidad es codiciada por otros.

En los  123,364 km² de superficie se hacen presentes innumerables fenómenos así sean biológicos, geológicos e hidrológicos, las aguas subterráneas son albergadas en 29 acuíferos, algunos de ellos explotados y sobre explotados (por el hombre)

sin embargo existen otros que gozan de cabal salud.

Contamos con una buena cantidad de presas de todos los volúmenes, dispersas a lo largo y ancho del territorio, cientos de bordos, pero secos por la falta de precipitaciones  

Las tres ciudades principales del estado están asentadas en acuíferos sobre explotados, con ello hay escasez y mala calidad (el arsénico y el flúor) 

Los principales nichos de producción agrícola no solo carecen de presas, sino que también los acuíferos ya no dan para más 

El reto es mayúsculo, pero aún tenemos la oportunidad sociedad y gobierno de demostrarnos y demostrar que los Duranguenses somos capaces de salir adelante de los desafíos al que nos enfrentamos 

No solo es acción de gobierno, pero si quien debe liderear, en armonía con productores y consumidores del agua que llega a nuestra casa. 

Ahí se las dejo, por mi parte estoy puesto desde hace rato.

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