En pleno proceso electoral, aumenta Toño Ochoa las multas de tránsito
En el operativo puesto en marcha por el Ayuntamiento para, presuntamente, mejorar la vialidad en Durango capital, existen algunos problemas. Y es que el gobierno municipal le apostó únicamente al aumento exorbitante de todas las infracciones de tránsito, sin tomar en cuenta que en un año electoral como el 2024 eso le puede repercutir de manera negativa.
Además, estos cobros llegan como si no fuera suficiente que el gobierno del estado le haya sumado un 20 por ciento al pago de refrendo y el Congreso del Estado haya dado luz verde a la obligatoriedad de un seguro, cuando menos de daños a terceros.
De esta manera, a partir del primer día de febrero, quien conduzca una motocicleta sin casco en Durango será multado con 760 pesos; si va un segundo pasajero sin casco también será sancionado con la misma cantidad y si van más de dos personas en la moto, la sanción será de mil 630 pesos.
Claro que nadie puede estar en contra de ordenar la vialidad o de exigir medidas de protección para disminuir accidentes fatales en motocicleta, de los que hay un gran número, pero no es con sanciones económicas tan altas, y menos enmedio de un inicio de año crítico, que se va a lograr el objetivo. Más bien parece un afán recaudatorio, por donde se le vea.
Asimismo, a conductores en primer grado de ebriedad se les multará con 3 mil 250 pesos y con 5 mil 430 para segundo grado; la cifra para tercer grado de ebriedad será de 7 mil 600 pesos, lo cual está muy bien en teoría, porque nadie debería andar por allí parrandeando y manejando, con alto riesgo para quien se le cruce en el camino.
La cuestión es que esta medida, ni otra, es pareja para todos; muy al contrario, sobran los casos en que se sanciona a quien tomó nada más una cerveza y anda en sus cinco sentidos, pero no hay ni una llamada de atención para los que manejan hasta en zigzag de lo ebrios que andan. Ellos ni son detenidos ni pagan multas.
Y sigue la lista: por pasarse una luz roja, el cobro será de mil 303 pesos; por estacionarse en línea amarilla, aunque hay cuadras enteras de línea amarilla sin justificación, 652 pesos; casi 4 mil pesos pagará quien no respete un espacio para discapacidad y mil 466 pesos será la multa para quien conduzca a velocidad inmoderada.
De igual modo, mil 580 pesos deberá pagar aquel que manipule el teléfono celular mientras conduce, mientras que serán mil pesos de multa para quien no use el cinturón de seguridad, mil 086 pesos todo el que no porte licencia de conducción y 543 pesos a quien la traiga vencida. Así los cobros.
La justificación para aplicar estas altas sanciones es que sólo pagarán quienes incurran en alguna de estas faltas, pero el Ayuntamiento de Durango dejó de lado factores fundamentales que le restan autoridad moral y no debe simplemente implementar multas, cuando estas son a criterio de quien las aplica, en primer lugar.
En segundo lugar, ¿cómo explican la evidente corrupción en las corporaciones policiacas, incluidas las viales, así como el indignante nivel de impunidad? “Aquí sólo hay que hacer la llamada telefónica correcta para salir del apuro”, dicen muchos. Y les funciona.
O sea, a un conductor en problemas le será más práctico y redituable intentar la nociva práctica del soborno y ver si el agente lo acepta, antes de que se le aplique una multa que no está dispuesto a pagar, menos si a otros infractores los dejan ir como si nada.
Tampoco ha contemplado el Ayuntamiento otras carencias dentro de un reordenamiento vial integral, como el hecho de que nadie le paga daños a conductores afectados por los baches y los bordos inadecuados. No están debidamente señalados los carriles en calles, avenidas y bulevares ni es idónea la funcionalidad en los semáforos. No Hay suficiente señalización ni funcionan las “ciclovías”.
Si persisten estas fallas a la hora de circular, el Ayuntamiento no puede ignorar eso y exigir que por parte del ciudadano todo sea óptimo; en un trato de dos, ambos tienen que poner condiciones, uno como autoridad responsable e incorruptible y otro como ente ético, para que la convivencia sea armoniosa.
No debe olvidarse la posibilidad de promover una ley que contemple como delito grave conducir en estado de ebriedad, como en otros países, donde se deja de conducir un auto casi un año, en el menor de los casos, o paga daños causados y va a prisión si hay lesionados o fallecidos en el percance que ocasionó.
El solo anuncio de las nuevas multas, el aumento al pago de refrendo y el seguro de autos obligatorio enojó ya al electorado, pero la irritación se puede magnificar a partir del uno de febrero y el efecto de todo esto se reflejará en las urnas el primer domingo de junio. Al tiempo.
COLMILLOS Y GARRAS
¿PUES QUIÉN LES entiende? Hace unos días, la secretaria de Salud, Irasema Kondo, aseguró que en Durango sólo habían aumentado un 5 por ciento las enfermedades respiratorias en este invierno y ayer informó que están saturados los Hospitales Materno Infantil y el General 450 por pacientes involucrados de percances viales, de enfermedades crónico-degenerativas y también de las vías respiratorias… ROCÍO REBOLLO DEJÓ la Secretaría de Bienestar y se registró por el PRI como aspirante al Senado de la República, aunque deberá pasar primero por el proceso interno del tricolor para saber si irá en la fórmula del PRIANRD, la cual será encabezada, casi es un hecho, por Gina Campuzano… SÓLO EN ESTOS últimos días han cerrado veinte negocios en el centro histórico, informó la presidenta de la Cámara de Comerciantes en Pequeño, Beatriz Zamora. O sea que empieza complicado el año para el comercio en general.
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