Tesla paralizará durante dos semanas gran parte de su producción en su planta de Grünheide, cerca de Berlín, debido a vacíos en las cadenas de suministro por los ataques a buques en el mar Rojo.
Durante dos semanas, el fabricante estadounidense de vehículos eléctricos Tesla suspenderá la producción en su planta de Alemania por la escasez de piezas debida al desvío de las rutas de transporte por los ataques hutíes en el mar Rojo.
«La considerable prolongación de los tiempos de transporte crea un vacío en las cadenas de abastecimiento», aclara Tesla en un comunicado emitido el viernes (12.1.2024). «A excepción de algunos subsectores», la producción será suspendida entre el 29 de enero y el 11 de febrero en la única planta en Europa, situada en las afueras de Berlín, añade el fabricante. «A partir del 12 de febrero, la producción se reanudará en su integridad», asegura Tesla.
Desvíos de rutas
Los ataques de los rebeldes hutíes de Yemen en el mar Rojo desde el inicio de la guerra entre Israel y el grupo Hamás han hecho que numerosas navieras eviten esta ruta crucial para el transporte marítimo global. Según Tesla, «los conflictos armados en el mar Rojo y el desvío de las rutas de transporte entre Europa y Asia a través del cabo de Buena Esperanza (en Sudáfrica) tienen igualmente repercusiones en la producción» en su planta europea.
El canal de Suez, que conecta el Mediterráneo con el mar Rojoz, constituye la ruta marítima más corta entre Asia y Europa. Por ella pasa un 12 por ciento del comercio mundial. El itinerario alternativo bordeando el continente africano alarga el trayecto de 10 a 20 días. Además, implica costes adicionales importantes para las empresas.
