El extraño silencio del gobernador
Se cumplió una semana del operativo militar en el que fue detenido Gerardo Soberanes, el G-1, superó el COVID-19 el gobernador Esteban Villegas Villarreal, lo cual es buena noticia para los duranguenses, pero la administración estatal sigue sin enfrentar la realidad respecto a posibles consecuencias de esta operación de las fuerzas armadas en Durango, pasando por encima de la soberanía estatal, ya que no le avisaron al mandatario estatal y, todo parece indicar, que siguen sin informar al gobierno de Durango acerca de esta investigación,
Mientras permanezca la administración estatal, encabezada por Esteban Villegas, en silencio total sobre este operativo del supuesto operador financiero de la organización criminal sinaloense, cualquier hipótesis, rumor o versión puede adquirir cierta credibilidad, porque el vacío informativo es muy grande, lo malo es que está creciendo la incertidumbre y desconfianza en la mayor parte de la población, en cuanto a seguridad y paz social.
Después de más de cuatro meses de haber asumido el poder en Durango, el actual gobierno de Villegas parece no encontrar el orden en sus obligaciones diarias, confunden sus frecuentes anuncios y desconciertan, pese a que puedan representar beneficios para los duranguenses. Es el caso de la inversión de más de mil millones de dólares para la próxima instalación de una planta de fertilizantes en Lerdo, Durango.
En cuestión de horas, el gobierno del estado y el municipal de Lerdo públicamente se proclamaron autores del proyecto y el seguimiento ante el gobierno federal, pero ese mensaje en dos vías aumentó más el desconcierto al presentarlo como un proyecto avalado por la Secretaría de Gobernación, cuando la instancia oficial para recibirlo, autorizarlo y, en su caso, continuarlo es la Secretaría de Economía.
Además, no está de menos mencionar que esa y otras inversiones son parte de un paquete que dejó para su continuidad el criticado régimen de José Aispuro. Por lo menos 7 proyectos productivos dejó casi listos para entrar en acción el gobierno anterior. Así es que no es un logro del presidente municipal de Lerdo, ni del nuevo gobierno del estado.
Así que algunas veces guardando silencio ante hechos lamentables y graves, y en otras ocasiones peleando la titula de inversiones que ya estaban muy avanzadas para ser una realidad, Esteban Villegas sigue confundiendo a los gobernados y eso sólo le sigue generando desgaste y escasa credibilidad. Por el bien de Durango, es urgente que establezca una línea firme en la gobernabilidad.
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