¡Es mi opinión eh!

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El tiempo pasa, y llego a su cuarto informe de Gobierno Andrés Manuel López Obrador, es tiempo suficiente para evaluar resultados, de conocer los logros y de comparar con otros Presidentes, con otros años y de otros Gobiernos, eso le toca a los organismos encargados de la evaluación y desempeño, pero también es momento de los ciudadanos.

Al aprobarse la ley de ingresos y el presupuesto de egresos para 2023, el ejecutivo tiene ya las herramientas para iniciar su quinto año de Gobierno con un monto de 8 billones de pesos, en donde los rubros más destacados que se contemplan es la contratación de casi un billón de deuda pública, por lo que así llegaríamos a los 14 millones, lo nunca antes visto.

El entrar  al quinto año de Gobierno, es casi obligado hablar de la sucesión presidencial, las corcholatas andan en campaña desde hace dos años, libres y gastando a manos llenas, no hay duda de que AMLO buscara ganar para su partido y su gente en el 2024, pero no está nada escrito.

Por lo pronto la aprobación de AMLO ha caído hasta 19 puntos, sin embargo, mantiene una posición que ningún otro Presidente había tenido al quinto  año de su gobierno, un 60 por ciento que es buenísimo.

El incremento del 20 por ciento en los salarios mínimos  está muy bien, porque busca recuperar el poder adquisitivo de la gente con una inflación tan alta, el problema es que toda micro y pequeña empresa van  a tener problemas de liquidez, si logra subsistir al momento de  hacer frente a este nuevo compromiso.

Un adelanto jurídico en bien de la sociedad, fue la aprobación de la legítima defensa en caso de que algún intruso o maleante quiera robarte o dañarte en tu persona o patrimonio, el ciudadano ya tiene elementos para defenderse, sin necesidad de juicio alguno.

Durango, sigue batallando entre el frío, la falta de dinero y ahora entre la meningitis, que es debido a la aplicación de anestesia caduca, traída de grandes volúmenes a precios sumamente baratos, lo grave es que ya se empieza a saber que también en Aguascalientes y Guanajuato traen problemas similares.

Siempre se ha dicho, que la temporada navideña genera o provoca ansiedad y depresión, ante la urgencia de regalar algo o de que le regalen, lo ideal es no esperar nada, ni dar nada, mejor haga lo que el presidente Toño  Ochoa y su cabildo, no ampliaron horarios de venta de bebidas  embriagantes, porque  de todos modos venden a diestra y siniestra, con permiso o patente o sin ella; o de plano chúpese un peyote, para que se ponga igual que los Diputados locales que quieren imponer un impuesto local por el uso de celulares, en una demostración más de su falta de preparación,  pues hablaríamos de caer en una doble tributación con lo federal.

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